"Mamá, la prohibición es impopular pero es la ley y debemos obedecerla" decía Lisa en un gran episodio. Lamentablemente, nuestras sociedades recurren muy frecuentemente a la prohibición para solucionar sus problemas, sea porque realmente creen que esta funciona perfectamente o por una cuestión de principios, es decir, de creer que no debe ser legal aquello que es incorrecto, más allá del aspecto práctico.
Sin embargo, creo que la realidad nos muestra demasiados indicios de que la prohibición tal vez no sea la forma de solucionar algunos problemas realcionados a la conducta de los ciudadanos. Desde un punto de vista pragmático, el gran problema es que nunca existirá un contrafáctico ideal para contrastar este tipo de decisiones.
Sin embargo, creo que la realidad nos muestra demasiados indicios de que la prohibición tal vez no sea la forma de solucionar algunos problemas realcionados a la conducta de los ciudadanos. Desde un punto de vista pragmático, el gran problema es que nunca existirá un contrafáctico ideal para contrastar este tipo de decisiones.
Dentro de la evidencia que es posible obtener, este estudio realizado en Inglaterra afirma que quienes crecimos en un hogar donde se bebe alcohol moderadamente delante de los hijos, somos menos propensos a beber en exceso (binge drinking). Otro estudio afirma que una actitud más abierta y realista en los padres hacia el sexo con los hijos adolescentes (en particular permitir que duerma con su pareja en la casa) puede contribuir a una actitud más responsable hacia el sexo por parte de los menores. Finalmente, ya es famoso el caso de Portugal, que despenalizó la tenencia para consumo personal (no el tráfico) de drogas y ha mostrado resultados positivos en términos de crimen relacionado. En tanto, las calles no se han llenado de gente drogándose.
Sin que esto lleve a la anarquía total, creo que debería considerarse un poco más, y desde una perspectiva pragmática, si prohibir algo es la solución a un problema, así sin más. Especialmente, sería bueno que lo piense un país muy poderoso que está entre los que requieren la edad más alta para poder beber alcohol, que tiene la tasa de embarazo adolescente más alta del mundo desarrollado y que gasta cantidades monstruosas de dinero en una guerra contra las drogas de dudosa eficacia.
Sin que esto lleve a la anarquía total, creo que debería considerarse un poco más, y desde una perspectiva pragmática, si prohibir algo es la solución a un problema, así sin más. Especialmente, sería bueno que lo piense un país muy poderoso que está entre los que requieren la edad más alta para poder beber alcohol, que tiene la tasa de embarazo adolescente más alta del mundo desarrollado y que gasta cantidades monstruosas de dinero en una guerra contra las drogas de dudosa eficacia.