A veces las cosas que uno estudia seriamente en la universidad pueden hacerse presentes de formas bastante cursiosas. Veamos un ejemplo:
En economía, dos bienes pueden definirse como sustitutivos o complementarios según su elasticidad cruzada sea positiva o negativa respectivamente. La elasticidad cruzada es una medida de la sensibilidad con la que reacciona la cantidad demandada de un bien frente a una variación en el precio del otro bien.
Si el precio de un bien, digamos una consola de videojuegos, sube, la demanda de juegos para esa consola seguramente caerá debido a que se comprarán menos consolas (porque están más caras) y entonces habrá menos gente que desee comprar juegos. En este caso, la cantidad demandada de un bien (los juegos) cae cuando el precio del bien complementario (la consola) sube. Estos bienes son complementarios.
Otro caso: si el precio de la margarina sube, es probable que muchos consmidores opten por empezar a untar sus tostadas con manteca, por lo que la demanda de manteca sube. En este caso, los bienes son sustitutivos.
Ya las propias palabras "sustitutivo" y "complementario" hacen bastante intuitiva la idea.
Pues bien, aquí mi punto: si el precio de los combustibles sube como ventosidad de buzo (como lo viene haciendo en los últimos tiempos) es de esperar que aumente la demanda de bienes que permitan sustituir el consumo de combustibles como es el caso de las biciletas. Y eso es precisamente lo que está pasando según esta noticia.
Hasta acá nada extraño. Dudo que a alguien le parezca rara la idea de usar la bici para ahorrar en nafta. Pero cuando uno lee que en algunos países lo que se dispara es la demanda de burros o camellos parece que las cosas están yendo demasiado lejos...
NOTA: a todas estas noticias fui llegando por Menéame.
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