Es cultural

Dos noticias bastante particulares aparecieron hoy en el mundo del fútbol europeo, ambas acerca de sanciones impuestas por la UEFA. Por un lado, a Serbia se le dio por perdido el partido contra Italia por las eliminatorias para la próxima eurocopa, que fuese suspendido a poco de comenzar, debido a incidentes provocados por sus seguidores.

A pesar de lo que sugiere la imagen, los que cagaron fuego son los serbios.

Por el otro, a Pinto, arquero del Barcelona, se le impuso una suspensión por dos partidos por pelotudo, eh... perdón, por imitar el sonido del silbato del árbitro, haciendo creer a un delantero rival que se le había sancionado offside.

Mientras tanto, acá en Sudamérica, le rompen la cabeza a un arquero y el partido sigue. En tanto, actitudes como marcar a un jugador metiéndole el dedo en el culo o insultándolo aprovechándose de sus padecimientos son viveza criolla, parte del folklore del fútbol. Y no hablemos de discriminación o de aprietes. Acá, todo pasa.